Cerdo negro de Bigorre con miel, tallarines de tres zanahorias

Precalentar el horno a 90 °C. 

Pelar las zanahorias y, con un pelador o una mandolina, cortarlas en forma de tallarines. Reservar.

Colocar las costillas de cerdo en una bandeja de asar. Hornear durante 60 minutos, rociándolas regularmente con los jugos de la cocción y unas cucharadas de agua.  

Mezclar la miel, la salsa de soja, el aceite de oliva y el pimentón de Espeleta en un bol.  

Sacar las costillas del horno. Con un pincel, aplicar la mezcla de miel por encima. Volver a meter en el horno con los tallarines de zanahoria alrededor. Rociar las zanahorias con un pequeño vaso de agua. Salpimentar. 

Aumentar el calor del horno a 180 °C. Continuar la cocción durante 15 minutos para que la carne esté bien dorada, la piel quede crujiente y brillante y las zanahorias estén todavía algo crujientes. 

Cortar el costillar en costillas y servir con los tallarines de zanahoria espolvoreados con cilantro picado.