Las tartaletas de tomate, ciruela y albaricoque son perfectas para un picnic o una merienda. Tan bonitas como deliciosas, podrían incluso servirse en una cena. Los sabores se complementan: la acidez de los tomates con la suavidad del albaricoque y la untuosidad de las ciruelas. Muy agradables recién salidos del horno.
Ingredientes Para
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250 g
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x 1
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4 cucharadas
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2 cucharadas
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2 cucharadas
Preparación
1
Precalienta el horno a 180 °C. Prepara la masa para la base de las tartaletas. Introduce 250 g de harina y una pizca de sal en un bol. Añade 125 g de mantequilla fría cortada en trozos. Mézclalo todo con las yemas de los dedos.
2
Agrega un huevo y mezcla hasta obtener una bola homogénea. Envuelve la bola en film transparente y déjala reposar en frío durante, al menos, 30 minutos.
3
Corta los albaricoques y las ciruelas en cuartos, quitando el hueso. Corta los tomates por la mitad. Estira la masa con un rodillo hasta que tenga 1 cm de grosor, aproximadamente.
4
Corta 8 discos de masa con un cortador de galletas. Pincha el fondo de las tartaletas con un tenedor.
5
Agrega una cucharada de almendras trituradas como base de las 6 tartaletas. Coloca unas rodajas de fruta y espolvorea con azúcar moreno.
6
Distribuye el pesto en el fondo de las 2 bases de tartaleta restantes. Espolvorea una pizca de flor de sal. Hornea durante 25 minutos.
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